Ciao! ¡He aquí las evidencias que he
seleccionado! Por un lado, algunas publicaciones de libros de ejercicios. He
publicado también artículos
en revistas nacionales y extranjeras, y en libros de Actas, en formato papel. Creo
que ambos tipos de publicación son un buen ejemplo del esfuerzo de un docente
por compartir con los demás sus materiales, experiencias e inquietudes.
Publicar implica, para un profesor “de a pie”, una gran inversión de tiempo y
de energías, ya que no tiene ninguna reducción de horas lectivas para llevar a
cabo tales actividades y las debe realizar en sus horas de descanso y ocio.
Otra evidencia, como se ha indicado en
este curso, es el esfuerzo del profesor por mejorar su enseñanza. El pasado mes
de abril tuve la oportunidad de gozar de una beca de estancia profesional en Milán,
donde pude trabajar como docente de lengua española y de historia de AICLE durante
dos semanas en el Liceo Statale “Primo Levi”. En el Instituto
Lingüístico, por cercanía y transparencia entre lenguas, la mayoría de los
alumnos eligen el español. La experiencia resultó sumamente positiva, tanto por
la gestión y la organización del centro como por el trato con los compañeros de
Italia, que realizan su labor con total dedicación, y también por la actitud
del alumnado, que mostró gran interés y participó activamente en las
actividades propuestas.
La tercera y última evidencia que quiero
presentar es la elaboración del tiramisú, que hacemos en julio con nuestros
alumnos de cursos de verano. Es una actividad que realizamos cada año y que
nuestro departamento considera divertida y útil: los alumnos aprenden a
cocinar, repasan el léxico de los alimentos y las herramientas de cocina, y se
entrenan con las instrucciones. ¡A los estudiantes les encanta hacer este
postre italiano y comérselo en la fiesta de final de curso, al día siguiente!
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